El Ayuntamiento de Tarifa entregó ayer la bandera de combate al patrullero de altura que lleva su nombre en un "merecido e ilusionante" acto de homenaje a las fuerzas del Estado incluido en los actos del Bicentenario del Sitio de Tarifa. Amadrinada por la esposa del alcalde, María del Carmen Criado Agüera, la ceremonia se celebró en el dique Sagrado Corazón, donde se congregaron autoridades civiles y militares, vecinos, familiares y amigos de los protagonistas.
Formaba la Compañía de Honores en el dique minutos antes del mediodía, hora prevista para el inicio del acto que quiso simbolizar el estímulo permanente que el municipio quiere ofrecer a la dotación del buque de guerra. En la presidencia se encontraba el almirante de la Flota, Santiago Bolíbar, el comandante del Tarifa P-64, Antonio Estevan, y el alcalde de la ciudad, Juan Andrés Gil.
La madrina agradeció su presencia a los asistentes y repasó la historia marinera, bélica y castrense de la ciudad. "Quiero deciros que ojalá nunca se enarbole esta bandera porque nunca tenga que entrar en combate. Pero si fuera necesario y España lo precisara, le pido al comandante de este buque que en ese grave momento alce la voz, hable a su tripulación y diga que esta bandera se le entregó en Tarifa", dijo la madrina.
María del Carmen Criado destacó además "respeto, cariño y admiración" de la ciudad a los profesionales de la Armada y dio testimonio del "sacrificio y valor extremo" de todas las madres de España que han despedido en un muelle a sus hijos. Encomendó a María Santísima de la Luz, alcaldesa perpetua de Tarifa, la protección de sus tripulantes.
Tras la bendición de la bandera, el comandante del Tarifa se arrodilló para recibirla. Estevan agradeció el gesto e indicó que la ciudad pasará a formar parte de la historia del joven buque y, con ello, de la Armada Española al tratarse de una acto tradicional desde el reinado de Carlos III. "La valentía y la defensa de unos intereses comunes sirvieron para resistir el ataque de unas fuerzas muy superiores estrechando en aquel enero de 1812 los lazos entre los tarifeños y sus Fuerzas Armadas", destacó.
Salvas y un repique de campanas de 10 segundos dieron paso al himno nacional y al solemne izado de la bandera, que se guardará en la cámara de oficiales hasta que sea necesario defender los intereses de España.
Además de la dotación del patrullero Tarifa, participaron en el acto la banda de música del Tercio Sur, Escuadra de Gastadores y una sección de Infantería de Marina del Tercio de Armada, una Sección de Marinería de la Fuerza de Acción Marítima de Cádiz y una sección de soldados del Regimiento de Artillería de Costa número 4 del Ejército de Tierra.
Formaba la Compañía de Honores en el dique minutos antes del mediodía, hora prevista para el inicio del acto que quiso simbolizar el estímulo permanente que el municipio quiere ofrecer a la dotación del buque de guerra. En la presidencia se encontraba el almirante de la Flota, Santiago Bolíbar, el comandante del Tarifa P-64, Antonio Estevan, y el alcalde de la ciudad, Juan Andrés Gil.
La madrina agradeció su presencia a los asistentes y repasó la historia marinera, bélica y castrense de la ciudad. "Quiero deciros que ojalá nunca se enarbole esta bandera porque nunca tenga que entrar en combate. Pero si fuera necesario y España lo precisara, le pido al comandante de este buque que en ese grave momento alce la voz, hable a su tripulación y diga que esta bandera se le entregó en Tarifa", dijo la madrina.
María del Carmen Criado destacó además "respeto, cariño y admiración" de la ciudad a los profesionales de la Armada y dio testimonio del "sacrificio y valor extremo" de todas las madres de España que han despedido en un muelle a sus hijos. Encomendó a María Santísima de la Luz, alcaldesa perpetua de Tarifa, la protección de sus tripulantes.
Tras la bendición de la bandera, el comandante del Tarifa se arrodilló para recibirla. Estevan agradeció el gesto e indicó que la ciudad pasará a formar parte de la historia del joven buque y, con ello, de la Armada Española al tratarse de una acto tradicional desde el reinado de Carlos III. "La valentía y la defensa de unos intereses comunes sirvieron para resistir el ataque de unas fuerzas muy superiores estrechando en aquel enero de 1812 los lazos entre los tarifeños y sus Fuerzas Armadas", destacó.
Salvas y un repique de campanas de 10 segundos dieron paso al himno nacional y al solemne izado de la bandera, que se guardará en la cámara de oficiales hasta que sea necesario defender los intereses de España.
Además de la dotación del patrullero Tarifa, participaron en el acto la banda de música del Tercio Sur, Escuadra de Gastadores y una sección de Infantería de Marina del Tercio de Armada, una Sección de Marinería de la Fuerza de Acción Marítima de Cádiz y una sección de soldados del Regimiento de Artillería de Costa número 4 del Ejército de Tierra.
Información recabada de Europasur
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